jueves, 8 de abril de 2010

Un actor de verdad


El otro día en un programa conducido por hombres y mujeres idénticos a periquitos australianos dijeron que William Levy estaba muy sentido el pobrecito porque la “crítica especializada” no sé lo tomaba en serio como actor. Acto seguido, el bueno de William decidió hacer lo que todo actor de verdad hace:




Sí, Teatro. Con T mayúscula. Sin lugar a dudas de ahora en adelante veremos a William como el gran actor que es y no como el usual pedazo de carne de la televisión.



Ojo, Mérida. Lleven pantalones bombachos para esconder las manos en el teatro.

-Perdón, ¿cuándo dijo usted que hay que llevar los pantalones bombachos?




1 comentario:

Anónimo dijo...

jajajajaaja tienes manos muy suaves para ser sirvienta