miércoles, 9 de marzo de 2011

Enterrando el pasado


Hace unos segundos, cuál fue mi sorpresa al entrar a casa de mamá, sin que nadie lo escuchara, cual sigiloso ladrón, descubrí a mi hermano salir furtivamente por la ventana de la que fue su habitación por casi treinta años.





Tranquilo, querido hermano, tu secreto está a salvo conmigo.

No hay comentarios.: